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Los viciados del PES, como yo, ya se lo creaban hace unos cuantos años |
Todo el mundo habla de él como la gran perla de la cantera del Barça y sobran motivos para ello. Thiago es un jugador increíble. Tiene una plasticidad digna del delantero o mediapunta más exquisito pero juega en el eje del centro del campo. Su visión de juego y su descaro están al alcance de muy pocos y sus recursos técnicos parecen interminables a primera vista. "El medio centro que, cuando se pone a regatear, parece un extremo" así los describía hace unos días en Twitter el experto en fútbol internacional de la Cadena SER, Bruno Alemany.
Pero resulta que es mediocentro y el joven jugador carece de una de las claves para triunfar en ese puesto, la constancia. Thiago es un jugador intermitente a lo largo de los partidos. Me di cuenta de ello al verlo en directo el día del Barça-Depor y los dos partidos del inicio del europeo sub-21 me han servido para certificar mi sospecha. Hay tramos en los que se esconde y le falta madurez para marcar los tempos de los encuentros. Si una parte de la personalidad que muestra al regatear a los contrarios la utilizará para analizar los partidos con el fin de dictar el guión de estos seria mucho mejor organizador y jugador.
Tiempo para mejorar tiene, es diferente y eso nos encanta a los periodistas ya que, al fin y al cabo, es del espectáculo de lo que vivimos pero me parece una aberración pensar que Cesc no aporta más que él a un equipo.
Dicho esto, me encanta Thiago. También me gustaba mucho De la Peña y pasará a la historia como un gran jugador pero del que todos, y el que diga que no miente, esperábamos una carrera más fructífera. Él opto por no definirse como un mediocentro o un mediapunta, veremos que hace Thiago.
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